Nuestra Señora de la Peña es la patrona de la isla de Fuerteventura, en las Islas Canarias. Su veneración tiene sus raíces en la época de la conquista de las islas, cuando, según la tradición, la imagen de la Virgen fue encontrada por los conquistadores normandos, dirigidos por Jean de Bethencourt, en el siglo XV.
Se dice que la imagen fue hallada en una cueva oculta entre las montañas de Betancuria, localidad que más tarde se convertiría en la primera capital de la isla.
La historia de la Virgen está impregnada de leyendas. Una de ellas cuenta que la imagen apareció milagrosamente en una roca (o «peña») y desde entonces comenzó a ser venerada por los habitantes de la isla.
Este relato le otorga el título de “La Peña”. La devoción hacia la Virgen se fue extendiendo con el tiempo, convirtiéndose en un símbolo de la identidad religiosa y cultural de los majoreros, como se conoce a los habitantes de Fuerteventura.
Celebración de la Virgen de la Peña
La fiesta en honor a Nuestra Señora de la Peña se celebra anualmente el tercer viernes o sábado de septiembre. El centro de la celebración es en el pueblo de Vega de Río Palmas, situado en el municipio de Betancuria.
Allí, se encuentra la ermita que guarda la imagen de la Virgen, un lugar de gran importancia religiosa y cultural para la isla.
En las semanas previas a la festividad, se organizan diversas actividades religiosas y sociales. El punto álgido es la romería, en la que miles de fieles y devotos se dirigen hacia la ermita para rendir homenaje a la Virgen.
Las personas llegan desde diferentes puntos de la isla y, en muchos casos, a pie, como una muestra de fe. Las calles se llenan de música, bailes, y trajes típicos canarios, reflejando la mezcla entre lo religioso y lo popular.
Actos litúrgicos y populares
El día de la festividad comienza con la misa solemne en honor a la Virgen de la Peña, donde se destaca el fervor religioso.
Tras la misa, se suele realizar una procesión en la que la imagen de la Virgen es llevada por las calles de Vega de Río Palmas.
Durante la procesión, los asistentes lanzan flores al paso de la imagen, y se entonan cantos religiosos. Los fieles piden a la Virgen por protección, salud y bienestar para ellos y sus seres queridos.
Después de los actos religiosos, la fiesta se transforma en una celebración popular. Hay comidas típicas como el gofio, el queso majorero, y el sancocho canario, que son parte esencial de la tradición.
Además, hay música folklórica, bailes y mercadillos que mantienen viva la esencia de la cultura canaria. Durante la noche, es común que se realicen verbenas, donde la gente baila hasta el amanecer, celebrando no solo a su patrona, sino también la unidad y la identidad de la comunidad.
El significado cultural
Más allá de su aspecto religioso, la festividad de Nuestra Señora de la Peña tiene un profundo significado cultural para los habitantes de Fuerteventura.
Es un momento para reforzar los lazos sociales, preservar las tradiciones y mostrar el orgullo de la herencia canaria. Además, atrae a numerosos visitantes de otras islas del archipiélago y del continente, lo que la convierte en un evento turístico destacado en Fuerteventura.
La devoción a Nuestra Señora de la Peña no solo representa la fe religiosa, sino también la riqueza cultural de Fuerteventura.
A través de esta celebración, la comunidad recuerda sus raíces, sus leyendas y fortalece el sentido de pertenencia en una de las festividades más importantes de la isla.
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